lunes, mayo 08, 2006

MIS GATOS


He pasado una noche fatal y mucho se lo debo a mis gatos. Es cierto que ellos no fueron cien por ciento culpables de mi insomnio, pues ya estaba el calor y los mosquitos, pero sí ccoperaron bastante para que mi descanso fuera poco y malo. A continuación enumero las faltas de mis gatos que considero graves.

1. En cuanto se separan (la madre del hijo) por más de dos minutos, cualquiera de ellos comienza una serie de maullidos a manera de reclamo. Esto dura poco, pero se repite mucho.

2. Se echan sobre mis pies de manera pesada. Pese a que durante el día parecen detestarme, en la noche sienten gran amor y lo demuestran echándose a mis pies, acalorándome e incomodándome. Últimamente lo resuelvo tirándolos de la cama de una patada sorpresa.

3. Me cazan los pies. Combinan esto con la echada en mis pies, de manera que al menor movimiento que hago, y estando ellos en posición privilegiada y ventajosa, me lanzan un fiero zarpazo, lo que adelanta y legitima la patada sorpresa.

4. A eso de las tres o cuatro de la mañana, les entra un súbito impulso juguetón y, ya descansados por haber dormido sobre mis pies, corretean por la casa entera, se suben a los burós, se cuelgan de las cortinas, etc.


A partir de hoy, duermen afuera.